Reflections on light – Mathias Hahn- segunda parte
Me interesa la luz como sombra y la gradación de la sombra en sí misma
-¿Qué te gustaría que el usuario de tus lámparas perciba?
– Si nos preguntamos por qué necesitamos un nuevo diseño de lámpara, para mi es lo mismo que preguntar por qué lees un nuevo libro, o por qué ves una nueva película.
El diseño de un objeto es más que una mera función o su propia apariencia formal. Es importante que las cosas funcionen. Pero, que tras haberlas utilizado un tiempo, la pregunta interesante es cómo encajan en nuestra vida cotidiana. Si dan pie a la interpretación y si de hecho les permitimos integrarse en nuestras rutinas, entonces se convierten en valiosas.
-¿Qué quieres provocar en el espectador?
-Todos tenemos un vaso o una taza favoritos que siempre acabamos cogiendo sin pensar. Es un uso intuitivo de los objetos, porque nos satisfacen. Si las cosas no son relevantes para nosotros no pasamos tiempo con ellas.
Lo increíble es cuando la gente puede crear su propia historia con algo que has diseñado y funciona. Cuando trabajo en un proyecto, pienso en este potencial. En cada nuevo diseño hago una propuesta clara definida, una afirmación, que en un primer estadio puede llevar al espectador a que le interese o atraiga. Pero luego hay un segundo estadio, que es cuando lo usas a lo largo del tiempo. Y te das cuenta de que hay más, que incluso es mejor de lo que pensabas.
-La última década ha sido de grandes cambios en iluminación artificial. ¿Tienes preferencias en cuanto a fuentes de luz?
-Para mí lo más importante es tener esta evolución en mente. No estoy a favor o en contra de lo antiguo o lo nuevo. Lo increíble es que hoy disponemos de muchas posibilidades. Y esto nos da una gran libertad para experimentar. Estamos todavía en medio del proceso de evolución. Estoy muy a la expectativa por lo que está por venir.
-¿El futuro de la luz artificial puede hacer la lámpara casi invisible?
-Creo que necesitaremos siempre algo de materialidad. Al menos en algún lugar, necesitamos el contexto. La tecnología puede ser muy sofisticada, pero nos sigue gustando tocar la mesa de madera, llevar los zapatos de cuero.
-¿Que lámpara que no hayas hecho te gustaría diseñar?
– Estoy trabajando en ello. Y lo bueno es que queda mucho por explorar. Me interesa especialmente la luz como sombra y la gradación de la sombra en sí misma.
-Cuáles son tus referentes en diseño
-Aprecio el trabajo de los diseñadores del pasado. Aunque no profeso ninguna “religión”. Ni sigo ningún manifiesto. Mi interés reside en comprender las cosas, entender su evolución. Tengo gran curiosidad por cómo las cosas funcionan en sí mismas, y también su contexto.
Por ejemplo, si hablamos de luz, me interesa preguntarme el porqué de la fascinación por la bombilla incandescente. Es un objeto funcional, pero también se ha convertido en un icono, y en un sistema internacional. Además apreciamos su fácil recambiabilidad… Hay muchos aspectos en torno a ella.
-Pero en tus nuevos trabajos usas la tecnología led
Hoy el led ha evolucionado mucho y se presenta en variados formatos. Si lo empleo es porque me permite realizar lo que busco. Y creo en la evolución. Pero por la misma razón que usamos velas, podríamos utilizar bombillas incandescentes.
-Por último, podrías dar alguna definición de luz.
-Podría decirse que la luz es el pincel que pinta todas las cosas del mundo. La luz es vida. Es una de las cosas esenciales que existen. En el mundo actual todos necesitamos la luz. Y estamos fascinados por ella, por esa relación con lo visual, con lo que podemos ver.