Ginger
de Joan Gaspar , 2014
Originalmente la colección Ginger empieza siendo un diseño de madera, un gran aliado de la iluminación más intimista. La combinación de láminas de madera, papel y resinas prensadas a alta presión consigue una luminaria de aspecto casi plano, sobrio, que ilumina los espacios con luz directa por reflexión desde una presencia leve.
Dentro de la misma colección, la Ginger también se edita en metal, un material muy distinto que ofrece la misma luz cálida, sin deslumbrar y que ayuda a subrayar espacios. Esta versión en metal se presenta con distintos acabados: latón cepillado, negro o blanco en su exterior, y en su interior latón cepillado o blanco. Una posibilidad más liviana, refinada, casi escultórica. Además se ofrece el accesorio clúster que permite conectar varias lámparas Ginger en un solo punto de luz. Con él, se consigue libertad absoluta para construir con la luz, crear distintas composiciones y poder iluminar espacios grandes.
La amplia colección Ginger aporta soluciones a cualquier necesidad de iluminación: distintos tamaños de suspensión, de sobremesa – incluyendo la versión portátil-, de pie, dos versiones de pared con brazo móvil, y cuatro tamaños de apliques de gran sencillez formal que se pueden combinar entre sí.
Con estos dos materiales tan diversos –la madera y el metal– la Ginger se convierte en una colección polivalente, tanto es así que se incorpora también su versión para exterior cerrando el círculo: Existe una Ginger para cualquier necesidad lumínica y estética.