Olga de la Iglesia es una artista y fotógrafa de Barcelona, cuyo trabajo analiza los límites entre la moda y la fotografía documental. En esta serie de fotos de la colección Dipping Light explora las posibilidades narrativas de las analogías visuales entre los colores y las formas. Siguiendo los principios de la pintura – enmarcar el arte- transmite un equilibrio exacto de formas, colores y texturas.

«El color no existe sin la luz, la luz nos guía a nuevos lugares, nos despierta, y siempre la buscamos para llenar nuestro ser. Los egipcios inventaron las velas, Edison la bombilla. Mis fotografías, que representan velas y la colección Dipping Light de diferentes formas y colores, pretenden crear una armonía de luz y captar la historia que las separa y las une como objetos que iluminan nuestras vidas, nuestros hogares».

Su trabajo pretende difuminar las líneas entre el plató y la vida real, y sus proyectos suelen ahondar en la relación entre los colores y la emoción. Utiliza la fotografía de moda para crear narrativas que analizan y abrazan las estructuras de diversas sociedades humanas. Olga se inspira en los seres humanos y en todo lo que creamos a nuestro alrededor: desde las herramientas y los objetos que utilizamos a diario, hasta los espacios en los que estamos y vivimos.